Viva el Mexicano Sufridor...pero Estoico.

Somos mexicanos y amamos sin reservas a nuestro hermoso país

Si alguien nos pregunta...¿estás orgulloso de ser Mexicano? Sin pensar le respondemos ofendidos: ¡Por supuesto que sí! ....Pero ¿qué es exactamente ser Mexicano? ¿Porqué estamos tan orgullosos de serlo? ¿Porqué no quisieramos haber nacido en ningún otro lugar del universo?.

Ese grán filósofo llamdo Jose Alfredo Jiménez nos deja ver empíricamente la escencia del ser Mexicano: Vivir para sufrir.


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“Es mi orgullo haber nacido en el barrio más humilde, alejado del bullicio de la falsa sociedad” dice José Alfredo. En otros países la gente está orgullosa de su cuna noble o aristocrática, de su árbol genealógico. En México eso es vergonzoso. De lo que hay que estar orgulloso es de haber nacido pobre, del lado de la gente que sufre, de los explotados. El punto es haber padecido en carne propia las dificultades de la vida…y no olvidarlo NUNCA. Así como mucha gente solo recuerda de Cuahutemoc su tormento, que le quemaron los pies, que sufrió, pero que no se doblegó. Así hay que ser de estoicos. Todo lo demás pierde validez. Si tu no sufriste no puedes comprender. Eres de “la falsa sociedad”. Y no hay nada peor. En una desgracia. Eres falso de origen. “Yo no tuve la desgracia de no ser hijo del pueblo, yo me cuento entre la gente, que no tiene falsedad”. Haber nacido pobre fue una bendición.

OK, eso es lo mejor, haber nacido pobre…O al menos no haber nacido rico. Pero ¿y el futuro? He aquí la respuesta: “Mi destino es muy parejo, yo lo quiero como venga, soportando una tristeza o detrás de una ilusión.” ¿El futiro debe de ser feliz? ¡NO! Que sean felices los débiles. Los explotadores, los colonizadores, los ricos. Si yo esperara un futuro bueno, traicionaría a mi origen. A lo que puedo asipirar es simplemente a tener “una ilusión”, pero obviamente sin hacer nada por alcanzarla. Es simplemente para hacer llevadera mi vida.

“Voy camino de la vida muy feliz con mi pobreza. como no tengo dinero, tengo mucho corazón”. Fui pobre y seguiré siéndolo, no importa si me gano el Melate: Hay que gastar todo el dinero posible que caiga en mis manos. ¿Para que ser rico? ¿Para ser infeliz? Traicionaría a todos mis conocidos quienes nunca serán ricos. Mejor seguiré siendo pobre, pero feliz. Eso sí, con mucho corazón. Como Pedro Infante, que a pesar de tener mucho dinero seguía siendo como el Torito. Pero con mucho muucho corazón, como para que quepan en él como 3 o 4 mujeres o más…y los hijos que resulten. Hay corazón para todos, no se aglomeren por favor.

“Descendiente de Cuauhtémoc, Mexicano por fortuna,” José Alfredo era blanco y de ojos verdes, pero era descendiente directo de Cuahutémoc, ¿Porqué no? Si precisamente él es nuestro portotipo del Mexicano: Vencido pero orgulloso, derrotado pero digno, pidiendo la muerte antes que la deshonra. La única estirpe de la cual se puede estar orgulloso en México, es ser descendiente del último emperador Azteca. Y si no es cierto, ¿qué más da? Con desearlo basta.

“Desdichado en los amores, soy borracho y trovador.” En México hay que andar con todas las mujeres que se pueda, pero no enamorarse de ninguna. Si te enamoras vas a sufrir…pero sufrir es el pasatiempo nacional, entonces…why not? Así que es mejor enamorarse de algún imposible, de alguien inalcanzable o hacer todo lo posible para que no nos quiera…el chiste es no ser correspondido para poder tener pretexto para ponernos borrachos…y para llevar serenata. No hay mexicano que cante feo cuando anda borracho. Es el mejor estado para cantar, y no digamos si somos mal correspondidos. ..¡Entonces hay que cantar a todo pulmón!

“Pero ¿cuantos millonarios quisieran vivir mi vida? Pa cantarle a la pobreza sin sentir ningún temor” Se pregunta José Alfredo. No importa si los millonarios están descansando en el Mediterráneo tomando champagne en sus yates, de seguro envidian la vida del Mexicano promedio que los días de quincena puede irse a tomar una cerveza con sus amigos, pero que pueden hablar de bendita pobreza con conocimiento de causa. No hay que tener temor de que lo corran a uno del trabajo, de que le cristalien el carro, de no tener dinero para ajustar un mes de 31 días. Miedo es no saber qué será la pobreza. Lo demás es lo de menos.

“Es por eso que es mi orgullo ser del barrio más humilde, alejado del bullicio de la falsa sociedad”. Hay que volver a mencionarlo, no sea que se nos olvide. Lo peor que nos podía haber pasado es haber nacido en la “falsa sociedad”. ¡Podríamos haber sido como Guadalupe Loaeza!
“Yo compongo mis canciones pa' que el pueblo me las cante, y el día que el pueblo me falle…ese día voy a llorar”. ¿Que es lo peor que me podía pasar si ya estoy acostumbrado a sufrir? ¡Pues que el pueblo me de la espalda!…Eso no hay ni qué pensarlo. La razón de mi vida, que es sufrir como sufre el pueblo, ya no tendría sentido. Sufrir por un amor es casi necesario, pero ¿qué el pueblo me falle? ¿Y luego con quién sufro? Sería peor que morir, porque yo sería un muerto en vida. Pregúntenle al Peje …Ahora Pásenme el pomo.


......¡Y QUE VIVA MÉXICO!